Desde 1999, cada 16 de abril se celebra el Día Mundial de la Voz como iniciativa de la Federación Internacional de Sociedades de Otorrinolaringología (IFOS).
El objetivo del Día Mundial de la Voz es sensibilizar a la sociedad acerca de las patologías relacionadas con la voz y de su prevención, diagnóstico y tratamiento.
Son muchas las profesiones que cuentan con la voz como una herramienta esencial de trabajo: profesores, cantantes, actores, locutores, conferenciantes, teleoperadores… Todos ellos presentan un riesgo mayor frente a los trastornos de la voz pero nadie está a salvo de verse un día afectado por alguna de las patologías que afectan a este medio de comunicación.
PATOLOGÍAS DE LA VOZ
Principalmente cuando hablamos de enfermedades que afectan directamente a la voz nos referimos a disfonías, nódulos y pólipos vocales.
- Disfonías: En la mayoría de los casos la causa es un mal uso y abuso vocal (esfuerzo vocal). En general, se clasifican en funcionales y orgánicas. En las primeras no existe una lesión anatómica evidente y en las segundas sí.
- Nódulos: Es la patología benigna más frecuente de las cuerdas vocales, pues supone el 17-24% de los casos. Predomina en mujeres de 20 a 50 años. En la infancia son más frecuentes en los niños que en las niñas.
- Pólipos vocales: Es el motivo más frecuente de cirugía de las cuerdas vocales. Cuatro de cada cinco casos se producen en varones de entre 30 y 50 años de edad.
CÓMO PREVENIR ENFERMEDADES DE LA VOZ
1. Evitar hablar con ruido ambiente
El ruido ambiente es lo que más perjudica la voz, ya que obliga a hablar elevando el volumen de la voz por encima de él. Cuando al ruido se le suma la polución del ambiente (humo) y la irritación interna (alcohol) se tienen las peores circunstancias para emitir la voz. En una discoteca baile mucho y hable poco.
2. No hablar por encima de nuestras posibilidades
Cada persona tiene una capacidad de resistencia al habla que depende de las características personales y del entrenamiento vocal que tengamos. Cuando se sobrepasan esos límites aparece la disfonía o una predisposición a padecer enfermedades vocales.
3. Limitar el tiempo de uso de la voz
Por lo general, se puede hablar 4 horas y se puede cantar 2 horas diarias.
4. Utilizar bien los recursos vocales
Ello implica no hablar agotando todo el aire de los pulmones o hablar con un volumen excesivo (se notan las venas del cuello). Cuando esto ocurre significa que gritamos o agotamos el aire y que hay una tensión muscular que se transmite a las cuerdas vocales.
5. Evitar los tóxicos (tabaco)
El humo del tabaco es el principal elemento tóxico puesto que además de la irritación provoca sequedad. Más de 4-5 pitillos al día provocan metaplasia de la mucosa.
6. Buena hidratación
Las cuerdas vocales necesitan estar bien lubricadas con una delgada capa de moco para poder vibrar de forma eficiente. Las bebidas alcohólicas y la cafeína disminuyen la lubricación. La mejor lubricación puede lograrse tomando agua suficiente. Se debe beber de 1,5 a 2 litros diarios. No es necesario ni conveniente beber más agua. Las bebidas isotónicas son de gran utilidad. Otro factor que puede afectar la lubricación es un ambiente seco, bien sea por estar en un lugar con aire acondicionado o muy poca humedad (aviones), o bien por sequedad climática. También existen medicamentos que provocan sequedad de la mucosa, como los antihistamínicos, los antidepresivos y algunos antihipertensivos.
7. Evitar el aclarado de garganta y la tos continua
Aclarar la garganta y toser con fuerza son acciones traumáticas para las cuerdas vocales y deben evitarse en lo posible. Una de las causas más frecuentes de aclarar la garganta y de toser es el moco espeso adherido a las cuerdas (suele ocurrir por las mañanas en personas con reflujo gástrico). La manera más segura y eficiente de aclarar la garganta es usando una tos productiva con un elevado flujo de aire con poco sonido. Esto se puede lograr siguiendo esta estrategia: respirar lo más profundo posible, manteniendo la respiración por un momento, y produciendo una “A” silenciosa y forzada mientras se exhala el aire.
8. Dormir lo suficiente y evitar los gritos y las tensiones psicológicas
La voz es muy sensible a la falta de sueño. Esto es especialmente cierto en los cantantes. Dormir menos de 6 horas produce cansancio vocal y predisposición a las lesiones vocales, siendo una causa importante para que los cantantes padezcan disfonía. Los gritos pueden producir lesiones como hemorragias o traumatismos que provoquen nódulos. La tensión psicológica aumenta el grado de contracción de las cuerdas y predispone a las lesiones.
9. Hablar poco en caso de laringitis
Cuando se tiene una inflamación de las vías respiratorias superiores (catarros) hay una congestión de la mucosa de las cuerdas que pueden producir hemorragias y otras lesiones estructurales si se usa la voz, incluso en tiempos limitados.
10. Buena salud general, ejercicio y alimentación equilibrada
El buen estado de salud general facilita una mayor resistencia al esfuerzo vocal. Una buena salud general y el ejercicio hace que se tenga una mayor capacidad pulmonar: el aire es la fuente de energía de la voz.
Fuente: medicinatv.com
