Los primeros alimentos del bebé son todo un tema. Generalmente ensuciamos toda la cocina para hacer una papilla de la cual el bebé come sólo dos cucharaditas a regañadientes. El resultado de todo esto es: cocina sucia, bebé enojado y madre frustrada. A continuación te contamos algunas cosas que te pueden servir.
No olvides que tu pequeño el único sabor que conoce es el de la leche materna o en su defecto maternizada. Es conveniente que la incorporación de los alimentos tanto en sabor como textura sea gradual y progresiva. Desde los 6 a los 12 meses el pequeño deberá seguir ingiriendo leche materna en una cantidad no menor de 500ml por día.
1. Será ideal que las primeras papillas tengan textura cremosa y lo más suave posible. Si tienes una procesadora o licuadora de alimentos es conveniente que la utilices para que la papillas se convierta en una crema. Si no la tienes asegúrate de que quede lo más suave posible utilizando un tenedor para pisarla. Puedes utilizar leche materna o maternizada para alivianar la textura.
2. Durante las primeras papillas, trata de no combinar los alimentos, prepáralos de a uno por vez para que tu bebé comience a diferenciar los sabores.
3. De inicio es mejor que utilices alimentos que tengan sabor dulce y suave, similar a la leche materna. De los vegetales elige zapallo, batata, zanahoria, y de las frutas elige banana, pera, durazno, manzana. Siempre elige frutas y verduras de temporada, tendrán mejor sabor y además son más económicas.
4. Cuando prepares verduras o frutas como la manzana, cuya consistencia es mas dura, hiérvela al vapor hasta que esté muy tierna, luego prepara el puré hasta que quede suave.
5. Los jugos deberán ser naturales y sin adición de azúcar, y deberían administrarse a cucharaditas, para evitar que el bebé se acostumbre a la mamadera y la “caries de biberón”
6. Los cereales o harinas de trigo, avena, cebada y centeno, por su contenido en gluten se administraran no antes de los 4 meses y no más tarde de los 7 meses para evitar la alergia. Las papillas de cereales pueden prepararse con leche materna, fórmula de inicio o la de continuación a partir de los seis meses.
7. La leche de vaca ni entera ni descremada, se le ofrecerá hasta después de los 12 meses. Tampoco yogures o derivados lácteos que no estén elaborados con leche de vaca maternizada.
8. Espera entre 7 y 10 días antes de la introducción de un nuevo alimento, para asegurarte de que el bebé no tiene alergia a ninguno de ellos y si fuera así podrás identificarlo fácilmente.
9. La carne aporta fundamentalmente proteínas y aminoácidos esenciales. Es fuente de hierro y Vitamina B. Suele ofrecerse en primer lugar el pollo por ser más digerible, de forma cocida y triturado con la verdura.
10. No añadas sal a la comida durante el primer año.
11. Cocina porciones pequeñas ya que las hortalizas de raíz (papa, zanahoria, batata) y las verduras de hoja no pueden conservarse.
12. Consideraciones especiales:
- Huevo: no debe introducirse hasta los diez meses, comenzando por yema cocida que puede añadirse a la papilla o puré. La clara cocida se dará a partir del año
- Pescado: no se introducirá antes de los 8 meses por su potencial poder antigenico.
- Chocolate, fresas y kiwis: se introducirán después del año por su potencial alergenico.
- Miel: no puede administrarse a menores de 1 año (algunos pediatras recomiendan 3 años) por el riesgo de contaminación con esporas de Clostridium botulinium causantes de botulismo.
Fuente: Comité asesor de bebesencamino.com