Es una tarea esencial para conservar tu salud digestiva y tu salud en general, con acciones simples que debes practicar todos los días.
Bebe agua, al menos ocho vasos al día para garantizar el movimiento de los alimentos y evitar problemas como el estreñimiento. Evita las gaseosas, el alcohol y las bebidas azucaradas en general.de fruta entera.
Reduce el consumo de carnes rojas.
Consume leche, pero deslactosada para evitar daños en tu digestión. No la evites por completo ni a sus derivados, ya que son esenciales para la producción de calcio que fortalece los huesos. También consume yogures, sus cantidades de lactosa son mínimos debido a los procesos de fermentación.
Come fibra, al menos 30 gramos diarios, especialmente fibra natural que puedas obtener de granos, verduras y una porción diaria de fruta entera.
Mastica correctamente hasta ensalivar tu bolo alimenticio, ya que la saliva aporta las enzimas necesarias para iniciar el proceso de la digestión. Toma tu tiempo para disfrutar tus alimentos en paz y pacientemente.
¡Muévete! una caminata, la práctica de un deporte, danza o el entrenamiento sistemático son cruciales para asegurar el movimiento normal de tu sistema digestivo
