Los problemas psicológicos en adolescentes son cada vez más frecuentes, los diversos casos resientes de tiroteos en escuelas estadounidenses por parte de adolescentes ha preocupado a los profesionales de la salud y a prestar atención al estado mental de la juventud.
Si bien la adolescencia es una etapa complicada, donde los padres pueden ver cambios en sus hijos, no solo físicos, sino también hacia ellos y su forma de ver la vida, caracterizado por la angustia y el mal humor, ¿Cómo saber si mi hijo se está comportando de manera normal o no?
La pandemia de Covid-19 parece tener algo que ver con este aumento de casos relacionados con la salud mental adolescente. Algunos expertos dicen que la socialización en jóvenes se basa en la interacción con sus amigos más que con su familia, y los encierros por pandemia cambiaron este paradigma, lo que pudo haber afectado socialmente a algunos adolescentes a sentirse menos sociables, aislados y desconectados.
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También la educación virtual pudo haber afectado a los jóvenes, debido a que el repentino cambio los tomó por sorpresa, tuvieron que adaptarse a un nuevo modelo educativo, lo cual, algunos nunca lograron hacerlo correctamente y sienten una desilusión por el aprendizaje.
Vigilancia de los padres
La detección de señales de que tu hijo no se está comportando normalmente dependerá de cada caso en concreto, por lo que se recomienda la observación de los padres hacia sus hijos.
- Una irritabilidad mayor, ira intensa pueden indicar ansiedad en el joven.
- La falta de higiene, cambios en los hábitos alimenticios, de sueño y la pérdida o aumento de peso, pueden ser algunas señales de que algo pasa en tu hijo adolescente.
- Los signos anteriores son de mayor preocupación cuando se convierten en un patrón en lugar de observaciones puntuales de pocos días.
- Observar a tu hijo adolescente en su desempeño en la escuela, en el hogar y en su círculo social también te ayuda a saber si algo anda mal con él/ella.
¿Sus calificaciones se mantienen en su regularidad?, ¿conoces a sus amigos?, ¿los has visto con él?, ¿cómo son?, ¿cómo actúan?, hacerse este tipo de preguntas te dará una idea sobre la vida de tu hijo en un ambiente social y escolar.
Hablar con los adolescentes de manera regular es la clave para la pronta detección de sus problemas, muchos pueden estar sufriendo de acoso y no revelan esta condición pro vergüenza de ser las víctimas, pero esto puede llevar a otras consecuencias más graves como problemas mentales, problemas alimenticios, autolesiones o la contemplación del suicidio.
Si has observado a tu hijo adolescente comportarse de forma no regular durante algunos meses, deberías buscar ayuda psicológica, las alarmas más importante y urgentes a las cuales prestarle mayor atención son las autolesiones.